30 agosto, 2019
Uber y Lyft se han unido en una campaña en contra de una normativa que podría afectar drásticamente el modelo de negocios de ambas empresas.
La AB5 (Assembly Bill 5) permitiría que miles de conductores del estado de California, que ahora están clasificados como contratistas independientes, sean reconocidos como empleados de Uber y Lyft.
Argumentos en contra
Las compañías han enviado millones de correos electrónicos y pedido a sus usuarios que se unan a ellas en su oposición a la nueva propuesta de ley.
Según Lyft el resultado de la nueva ley sería un desmejoramiento notable del servicio, con mayores tiempos de espera y menores opciones de acceso.
Uber ha señalado que forzar a los conductores a convertirse en empleados podría cambiar drásticamente la experiencia del usuario y limitar la capacidad de la empresa para conectarlos con conductores confiables.
El caso a favor
Al estar clasificados como contratistas los conductores de Lyft y Uber carecen de cualquiera de los beneficios que obtendrían como empleados, incluyendo seguro médico, programas de seguridad social, pago durante días de enfermedad y horas extras.
Muchos conductores también argumentan que sus pagos han disminuido al tiempo en que el costo de vida ha aumentado.
A principios de esta semana una caravana de conductores de ambas empresas sirvió para darle mayor visibilidad a la demanda por un salario mínimo.
Los promotores de la AB5 denunciaron los esfuerzo de Lyft y Uber por combatir la nueva ley como una campaña de desinformación.
Repercusiones
Si la ley se implementa de forma efectiva es muy probable que tenga un impacto económico directo e inmediato dada la importancia del estado de California (Es la quinta economía más grande a nivel mundial superando a muchas naciones). Pero también es posible que siente la base para que otros estados y países adopten una legislación similar.
