4 abril, 2014
Las capas ofrecen funcionalidades específicas a las aplicaciones que componen la suite de Adobe. Desde la versión Adobe CS4, nos han entregado información, funcionando de manera similar en todos los programas en los que se pueden utilizar (Photoshop, Illustratore InDesign).
El concepto de capa se relaciona con la idea de un espacio virtual de información. Las capas están ordenadas de forma lógica: lo que está arriba pertenece a la primera capa y se encuentra sobre la información de la segunda capa, y así sucesivamente hasta completar todas las capas. La última corresponde al fondo o base de la imagen.
Al referirnos a las capas no hablamos de imagen y no identificamos mapa de bits, vector o página de libro de InDesign, pues en los tres programas el concepto de capa se aplica de la misma manera.
Debemos saber que en las diferentes capas pueden existir elementos independientes (cuando cada uno de ellos está en capas diferentes), o también podemos encontrar varios elementos en una capa. En todo caso, la ventaja en el uso de capas es la posibilidad de organizar todos elementos para enfrentar el trabajo.
Operaciones generales sobre capas
Una de las operaciones que podemos realizar en las capas es asignarles un nombre. El nombre puede ser numérico, de fantasía o también literal. Por ejemplo, si en la capa se dibujó un ojo, se puede llamar Ojo.
En este punto es necesario considerar que si bien la creación de capas nos brindará la posibilidad de ordenar el trabajo, el peso del archivo aumentará en forma proporcional a la cantidad de capas que creemos. Por ejemplo, si tenemos un archivo de 1 MB y le agregamos dos capas, contengan o no información, al guardar el archivo encontraremos que su peso será el doble. Imaginemos un archivo con cincuenta capas, con información vectorial y mapa de bits. Seguramente, su gran tamaño hará que la computadora se cuelgue, por lo que corremos el riesgo de perder información valiosa.
Otra de las opciones generales que nos ofrecen las capas esla posibilidad de mostrarlas u ocultarlas. Si estamos haciendo un trabajo complejo en el que es necesario redibujar una imagen, es posible colocar la imagen en una capa (que permanecerá visible mientras dibujamos), y en otra redibujar. También podemos modificar los valores de bloqueo y opacidad.
Existe un dato muy importante que debemos tener en cuenta cuando trabajemos con capas, se trata de la posibilidad de visualizar y trabajar con diferente cantidad de transparencia. Según el color y el programa en donde lo apliquemos, podremos variar la transparencia y obtener una imagen de las capas superiores que permita la visualización de la información que está en las capas inferiores.
De esta manera, con el cambio de un porcentaje de transparencia, se modificará la visualización de las capas para mostrar lo que necesitamos de cada una de ellas.
Capas y texto
Para concluir, tengamos en cuenta que cuando trabajamos con tipografías en Photoshop y no convertimos el texto en mapa de bits (rasterizado), generamos una nueva capa completamente editable, que permite modificar la tipografía, el tamaño, el color, el formato, y hasta reescribir el contenido del texto en caso de ser necesario.
Por su parte, InDesign e Illustrator no trabajan de la misma manera, pues los textos son editables de forma predeterminada, y para que no lo sean, debemos convertirlos en contornos o curvas.
