3 diciembre, 2013
Spotify ha logrado establecer un modelo exitoso vinculado al streaming de música. Tiene más de 24 millones de usuarios activos y recientemente ha conseguido unos USD 250 millones en una ronda de inversores. Sin embargo, varios artistas se han quejado señalando que la compañía no ofrece beneficios adecuados para los nuevos interpretes y bandas. Algunos de dichos artistas se han retirado al tiempo en que nombres más consagrados se han unido al servicio.
Como respuesta a estos cuestionamientos Spotify ha anunciado la creación de un nuevo sitio, Spotify/Artists, destinado a servir como enlace entre los músicos y la compañía. La compañía también espera que sirva para informar sobre las posibilidades que brinda el medio para todos los músicos. En particular, se busca una mayor transparencia respecto a los mecanismos utilizados para establecer los pagos. Por otro lado, el sitio también servirá como plataforma estilo “Analytics” para que tanto los artistas como sus representantes puedan comprobar las repercusiones de su trabajo. Para este último aspecto la empresa se ha asociado con Next Big Sound. Para el futuro se espera agregar listas de entradas y productos relacionados. De esta manera Spotify planea desterrar la idea de que la empresa no constituye un soporte financiero valioso para los nuevos artistas.
Según Spotify, durante 2013 la empresa ha pagado USD 500 millones en concepto de derechos a los músicos y sellos discográficos por las reproducciones de sus temas. Se calcula que desde 2009 la cifra acumulada llega a los USD 1.000 millones. La compañía ha señalado recientemente: “Nuestra creencia siempre ha sido que si ofrecemos a los fans una experiencia superior a la de la piratería, ellos pagaran con agrado por ella y como consecuencia nosotros estaremos felices de pagar casi el 70% de lo conseguido en concepto de derechos”.
Los cambios empleados no suponen en sí una modificación en las reglas empleadas por Spotify para calcular la retribución que merecen los artistas participantes. Por tanto solo queda ver si una mayor transparencia en el proceso ayudará a convencer a los músicos de que lo que están recibiendo es lo justo.
Fuentes: Techcrunch, Engadget