21 noviembre, 2013
Cuando las aguas parecían más calmas, una nueva determinación de un jurado de Estados Unidos vuelve a poner a Samsung y a Apple frente a frente. Según informa The Verge, la cuna de la gama Galaxy deberá abonar US$290 millones extra a los creadores de iPhone por haber plagiado patentes de aquel smartphone.
En un breve repaso, el año 2012 fue escenario para el recrudecimiento de la batalla legal entre ambas firmas. En los estrados, Apple argumentó que Samsung había copiado las patentes de su teléfono insignia, además de características de su diseño. El jurado, liderado por Lucy Koh, había fijado el pago de una suma cercana a los US$1000 millones a favor de los de Cupertino de los cuales, más tarde, se ratificaron cerca de US$600 millones. Los US$290 millones que ahora aparecen en los titulares de prensa se corresponden a un excedente de esta multa derivados de “errores en los cálculos”, según indica ABC.es.
De este restante, Apple había solicitado cerca de US$380 millones, al tiempo que la firma surcoreana hablaba de una suma cercana a los US$52 millones. En este punto, la determinación aparece más próxima al pedido de la firma de la manzana, aunque en una merma de US$100 millones.
Kristin Hughet, vocera de Apple, dio cuenta al sitio AllThingsD de la conformidad de la compañía que representa y añadió que “se trata de la innovación y el trabajo duro que supone inventar productos queridos por la gente” y no solamente de dinero. Samsung, por su parte, manifestó su decepción por la decisión y dijo, según reproduce The Verge, que mientras avanzan las apelaciones seguirán “innovando con tecnologías y grandes productos que son amados en todo el mundo”.
Tal como anticipa Samsung, el fallo recién salido del horno no determina el cierre de esta batalla: ahora es el turno del proceso de apelaciones. La historia continúa.
Imagen: The Apple Lounge
