2 octubre, 2019
Samsung ha dejado de producir teléfonos en China. La última fábrica que la compañía de origen surcoreano mantenía en dicho país ha cerrado.
Las razones para esta salida son, según explica la compañía, el impacto que ha producido la competencia cada vez más intensa de las empresas locales en el mercado de los smartphones.
El mercado equivocado
En 2013 Samsung tenía una participación del 15% en el mercado chino, a principios de 2019 apenas alcanzó el 1%. Marcas como Huawei y Xiaomi han crecido y desplazado a Samsung en las preferencias de los consumidores.
Actualmente los consumidores compran teléfonos de gama baja de marcas locales y cuando adquieren los de gama alta eligen entre Huawei y Apple. Aunque Samsung continuará vendiendo sus dispositivos en China no tiene muchas esperanzas de recuperar una posición de fuerza.
Más salarios y menos economía
Es importante señalar que además de la competencia uno de los factores claves de la retirada de Samsung es el crecimiento de los costos laborales en China.
Durante los últimos años el salario mínimo de los trabajadores en dicho país ha aumentado, lo que generalmente es una buena noticia, pero puede ser problemático si en la región existen otros países con sueldos mínimos mucho menores. Samsung no es la única empresa que ha abandonado China, Sony también ha movido su producción a Tailandia.
En el caso de Samsung la producción ha sido trasladada a varios países, incluyendo la India y Vietnam.
Otro aspecto que sin dudas ha influido ha sido el desaceleramiento del crecimiento de la economía china.