7 agosto, 2019
Rocket League es uno de los juegos más populares de la actualidad (Se ubica entre los 10 primeros en el ranking de Steam). Desde su lanzamiento en 2015 esta propuesta se ha convertido en una de las fuentes de entretenimiento favoritas de muchos aficionados.
La desarrolladora de Rocket League, Psyonix, fue comprada en mayo de 2019 por Epic Games, la empresa creadora de Fortnite que ha hecho una gran apuesta al lanzar su propia tienda online para videojuegos.
Aunque el juego todavía está a la venta en Steam, existen rumores de que una vez que aparezca en la Epic Games Store, a fines de 2019, dejará de estar disponible en la primera tienda.
Esta movida se ajustaría a la estrategia de títulos exclusivos que no ha sido particularmente bien recibida por los aficionados a los videojuegos.
No más loot boxes
En este contexto Psyonix ha anunciado que a fin de año dejará de lado las loot boxes y abrirá una tienda. Es decir, en vez de comprar una caja con una serie de objetos al azar, los jugadores podrán ver que es lo que están comprando.
La movida no es sorpresiva porque una gran parte de la economía de Rocket League ya se basa en adquisiciones directas y pases de temporada (sin contar el costo del juego en sí). El esquema también es similar al que utiliza Fornite, y que ha sido más que exitoso para Epic Games.
En efecto, las compras directas ya están presentes en Steam.
El anuncio tiene sin embargo una función adicional dado que Psyonix ha destacado la influencia de Epic en esta decisión. Epic Games necesita demostrar que como vendedor ofrece ventajas a los consumidores, y darle fin a uno de los sistemas de comercialización más polémicos de la industria es sin dudas una buena estrategia.