Finalmente empezamos a ver propuestas que nos acercan a la música de manera legal y económica. Lo que para muchos usuarios era una obviedad desde hace tiempo, para las discográficas se “reveló” en los últimos tiempos: la mejor forma de combatir la piratería es que el usuario pueda acceder a la música que le gusta sin desembolsar fortunas y sin tener que acumular canciones que no le interesan y por las cuales se vio obligado a pagar.

El eje de Spotify (www.spotify.com) no es muy diferente a otras propuestas con varios años de trayectoria: permitir el acceso a una librería musical enorme vía streaming (la música se transfiere a medida que la escuchamos, si necesidad de descarga previa a la computadora).

Pero hay dos ejes que lo diferencian del resto. En principio es gratuito si se accede con publicidad insertada, pero además la versión paga habilita la descarga de música para escuchar offline y aumenta la calidad del audio por 4 a 5 dólares mensuales (costo de la versión Premium con todos los servicios está fijado en ARS $ 36 por el momento).

Nos enfocaremos en esta última alternativa, que es la que nos brinda acceso a todo el potencial de Spotify.

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La pantalla inicial de Spotify destaca las playlist y artistas del momento en la parte central, mientras que a la izquierda tenemos nuestra actividad y a la derecha la de los usuarios

La aplicación

La web de Spotify es uno de los canales más sencillos para acceder al servicio. Sin embargo, se exprime mejor a partir de las aplicaciones oficiales disponibles para computadorassmartphones y tablets.

Para esto en principio debemos crearnos una cuenta y, lógicamente, descargar el software.

Empecemos por la versión para computadora. Desde el diseño encontramos algunos ribetes que nos remontan a iTunes, con elementos redondeados y mucho uso de los grises, pero esto es sólo desde lo estético.

La aplicación ofrece varios canales para acceder a la música de su catálogo. Podemos usar el buscador tanto para artistas como para álbumes o canciones; las sugerencias del propio Spotify a partir de nuestro perfil, que se alimenta de nuestras selecciones personales, sincronización con las redes sociales y las lista de canciones que tengamos alojadas en formato de archivo de audio por fuera del servicio; las playlists, listas organizadas por usuarios o el propio servicio basadas en una temática puntual; las radios, que nos ofrecen música similar a la del artista que elegimos como referente; o aquellas personas que seguimos dentro de su propia red.

Todo esto se encuentra organizado a modo de menú sobre el lateral izquierdo, aunque también se destaca en el área central de la aplicación.

Sobre el lateral derecho están las novedades de los músicos que decidimos seguir (opción que aparece cada vez que escuchamos la canción de alguno). Muchos de ellos incluso arman sus propias listas de reproducción con lo que consideran su mejor material.

Las playlist resultan un gran recurso para poner a sonar música acorde a un momento determinado, o incluso descubrir nuevas propuestas.
Las playlist resultan un gran recurso para poner a sonar música acorde a un momento determinado, o incluso descubrir nuevas propuestas.

Las playlists

Es una de las funciones que más entusiasman de Spotify. El mercado musical actual está más basado en la combinación de buenas canciones de varios artistas que en la escucha de álbumes enteros (costumbre que preservamos algunos treintañeros para aquellos artistas de la talla de Pink Floyd, por nombrar alguno).

En función de eso, el servicio nos propone experiencias musicales basadas en temáticas de lo más variadas, como ser “Inyección musical matinal”, para arrancar el día con buen ritmo; “Sueños”, para las últimas horas del día; “Reunión de amigos”, para amenizar esas cenas de fin de semana y hasta la categoría “¡A limpiar!”, para cuando no nos queda otra que poner orden en ese caos que es nuestra casa. A estas se suman otras más tradicionales vinculadas a géneros musicales o a regiones.

La ventaja de las playlists es que muestran la totalidad de canciones que la componen, con datos de artistas y álbumes a las que pertenecen. Esto nos permite ir agregando las que más nos gusten a nuestra lista personal, o incluso empezar a seguir a artistas desconocidos hasta el momento.

Podemos también seguir a las playlist para enterarnos de los agregados que se hagan a las mismas, crear las propias y compartirlas en redes sociales.

A partir de nuestra colección de música local Spotify aprende de nuestros gustos y mejora la oferta. También sirve como reproductor para eso.
A partir de nuestra colección de música local Spotify aprende de nuestros gustos y mejora la oferta. También sirve como reproductor para eso.

Nuevos lanzamientos y éxitos

Este es otro aspecto fundamental de un servicio de estas características. Estar al tanto y tener acceso a lo último del rubro de la música es un valor agregado muy tenido en cuenta. En esto Spotify está bastante a tono y en el apartado [Nuevos lanzamientos] encontramos los singles casi en simultáneo con su lanzamiento, siempre con la posibilidad de escuchar de inmediato, seguir o agregar a nuestras listas personales.

Por otro lado están los éxitos, basados en lo que más se escucha dentro del servicio. La sección [Listas de éxitos] es la que nos lleva a esto. Podemos organizar esas listas por álbumes, artistas o canciones; y a su vez por nuestro país de origen, otros países, en todo el mundo o en función a nuestros gustos.

La sección destinada a los últimos lanzamientos es una de las favoritas de muchos usuarios, en tanto tienen aquí lo más reciente apenas se presenta.
La sección destinada a los últimos lanzamientos es una de las favoritas de muchos usuarios, en tanto tienen aquí lo más reciente apenas se presenta.

Música offline

Esta función es exclusiva del servicio Premium. Hay que hacer una aclaración. Spotify no permite hacer la descarga de canciones como si se tratase de un MP3 que luego podemos copiar a un pendrive o al smartphone y compartir por fuera.

Lo que se descarga es una secuencia encriptada que sólo puede ser leída por la aplicación de Spotify. Ocupa el mismo espacio en el disco que un MP3 de 192 Kbps, pero no es accesible de manera independiente.

Hay que tener en cuenta esto porque, cuanto más descarguemos, más notaremos la reducción de espacio libre en la unidad. Es útil si es habitual el uso de nuestra computadora, tablet o smartphone sin conectividad. También puede resultar interesante para armarnos de una colección para cuando salimos de viaje. Caso contrario no tiene mucho sentido, ya que de todas formas la música está allí, en la nube.

A partir de la elección de un artista podemos descubrir sus hits más escuchados, agregar los que queramos a nuestra lista, descargarlos (con clic secundario y [Guardar]) o iniciar una radio basada en su estilo.
A partir de la elección de un artista podemos descubrir sus hits más escuchados, agregar los que queramos a nuestra lista, descargarlos (con clic secundario y [Guardar]) o iniciar una radio basada en su estilo.

El streaming

Aquí, un punto clave para cualquier servicio de este tipo. La verdad no podemos quejarnos de las cualidades del streaming de audio de Spotify, ni en calidad ni en fluidez. De hecho, probamos la versión móvil bajo una conexión 3G y no tuvimos problemas de cortes. Claro que acá la condición es que esa conexión móvil sea estable y cumpla con brindar lo mínimo que se espera en velocidad para un 3G.

Un dato interesante: en todas las versiones de la aplicación tenemos la posibilidad de asignar un tamaño para el buffer (fundamental para que se haga una carga previa y así las canciones sufran la menor cantidad de cortes posibles) y también quitar el tilde (por defecto activado) del streaming en alta calidad. Salvo que seamos muy exigentes, la diferencia casi no se notará y ganaremos muchísimo en fluidez ante conexiones saturadas.

El apartado de configuración nos ofrece controlar el tamaño asignado al buffer del audio, además de quitar la tilde [Streaming en alta calidad] si la velocidad de la conexión no es buena.
El apartado de configuración nos ofrece controlar el tamaño asignado al buffer del audio, además de quitar la tilde [Streaming en alta calidad] si la velocidad de la conexión no es buena.

Calificación

90 %

 

Pros

+ Buena calidad de sonido

+ También permite música offline

+ Acceso a novedades musicales y playlists compartidas

 

Contras

– La música bajada está encriptada (sólo puede reproducirse offline con Spotify)

 

Andrés Fiorotto | andres@redusers.com