Las TVs dejaron de ser cajas bobas para convertirse, en los últimos años, en dispositivos inteligentes de entretenimiento digital que ocupan un lugar central en la conformación de la experiencia multimedia de un hogar. El primer paso fue convertirlos en “smart” al sumarles internet y aplicaciones, mientras que el lógico paso siguiente fue mejorar su software con plataformas mucho más robustas.
En este sentido, fue recibido con los brazos abiertos el desembarco de Android TV en la industria de los televisores. La plataforma de Android no solo es la más utilizada del mundo en lo que refiere a smartphones, sino que aporta la robustez y la flexibilidad necesaria como para adaptarse a cualquier tipo de contenido, incluyendo Apps y videojuegos.
En Argentina, las primeras TVs con esta tecnología desembarcaron en 2015, siendo Philips la más ambiciosa en los planes de comercialización local. Actualmente, la firma holandesa ofrece las series 6100 y 7100 con Android TV; en RedUSERS.com tuvimos la oportunidad de probar ésta última, que incluye resolución 4K y soporte para contenidos 3D. Nuestras impresiones, a continuación.
Diseño
Lo mejor que ha hecho la tecnología de paneles planos es mejorar de manera notable el diseño de los televisores. Hoy por hoy, no existe nada más tosco y arcaico que una vieja TV de tubo.
Es por ello que no sorprende el refinamiento en las líneas del 7100. En 2016, prácticamente todas las TVs apuestan a diseños sobrios que se combinan de manera natural con el ambiente en el que se las instala. En el caso del Philips, sus líneas hacen gala de un minimalismo absoluto; las silueta rectangular solo se ve interrumpida por las dos finas patas de metal que sostienen el marco.
En la parte trasera, abunda la austeridad, solo interrumpida por el subwoofer, los conectores (3 puertos USB y 4 HDMI) y los LEDs del sistema Ambilight, un clásico de los televisores de la compañía. La única crítica en este apartado, si es que se la puede considerar como tal, es que el diseño general del equipo resulta algo falto de “chispa”. Es sobrio y elegante, aunque podría haberse arriesgado un poco más en sus detalles.
Pantalla
El elemento central de toda TV es su pantalla. Podemos hablar del software y de sus múltiples funciones, pero sin un buen display, todo lo demás deja de tener sentido. Afortunadamente, el 7100 no tiene problema alguno en enfrentar este apartado, ya que ostenta un majestuoso panel LED Ultra HD con una resolución de 3840x2160p.
La variante testeada fue la de 43 pulgadas, la más pequeña de la serie. Esta versión posee una densidad de pixeles de 102 ppi, brillo de 400 cd/m² y frecuencia optimizada de 800MHz.
Vale destacar que el 7100 suma varias tecnologías para optimizar la imagen: Natural Motion (reduce la trepidación), Micro Dimming Pro (ajusta el contraste respecto al entorno) y Pixel Precise Ultra HD. Todo esto se conjuga en una excelente calidad de imagen, acorde a un dispositivo que luce (y vale) como un verdadero alta gama. Los colores son nítidos, sin demasiada saturación (tal vez los usuarios acostumbrados a teléfonos AMOLED sientan la falta de colores saturados), lo que se traduce en una experiencia de uso por demás agradable.
Aún así, vale reflexionar sobre la inclusión de tecnología 4K en una TV de 43 pulgadas. En las pruebas realizadas, se utilizó una cuenta especial de Netflix con acceso a contenidos en Ultra Alta Definición. Luego de horas y horas viendo todo tipo de contenidos (afortunadamente, el servicio de streaming ofrece gran parte de sus series originales en 4K) la conclusión fue compartida por toda la redacción: La diferencia de precio que existe entre una TV de 43 pulgadas 4K y una FullHD es mucho mayor que la que existe en la imagen entregada. Si bien la diferencia se nota a corta distancia, al tener el display a 2,5 metros metros de distancia esos pixeles extra pasan casi desapercibidos. En definitiva, sigue siendo una tecnología mucho más aprovechable en paneles de mayor tamaño (55 pulgadas o más).
Accesorios
La serie 7100 incluye uno de los mayores aciertos de Philips a nivel tecnología. Hablamos del control remoto con teclado QWERTY incluido, una solución que también implementan en otros televisores de la marca y que resulta una solución ideal para interactuar con los contenidos del Smart TV. Este accesorio incluye además un pequeño micrófono, lo que brinda la posibilidad de realizar todo tipo de acciones mediante comandos por voz, gracias al soft de Google.
El kit de accesorios se completa con cuatro anteojos 3D activos, que resultan útiles sobre todo para aprovechar la tecnología de Dual Gaming. Presente también en otras marcas, esta plataforma permite a dos jugadores ver su pantalla de manera completa, cuando se trata de videojuegos que utilizan pantalla dividida. Básicamente, cada pantalla puede ser vista solamente por uno de los dos lentes.
Un dato extra a tener en cuenta: Al tener soporte Bluetooth, puede utilizarse un joystick (que no viene incluido) para aprovechar mejor los juegos del Store de Google. La TV da la posibilidad de utilizar el control remoto como mando, aunque no siempre es la opción más cómoda para este tipo de actividades.
Software
Android TV es uno de los grandes “caballitos de batalla” de la serie 7100, ya que se trata del sistema operativo móvil más popular del mundo, en su variante para pantallas de gran tamaño. Las ventajas, con respecto a otros sistemas operativos para TVs, se basan en los cientos de miles de desarrolladores que trabajan con este software, aunque en la práctica no es todo color de rosas.
Al ser una versión de Android diseñada específicamente para televisores inteligentes, el número de Apps compatibles se reduce drásticamente. El Store luce bastante más despoblado que en móviles, por lo que muchas de las Apps más populares brillan por su ausencia. Lo mismo ocurre con los juegos: la oferta, si bien es variada en opciones, es reducida en cantidad de títulos disponibles.
Por otro lado, a la mayoría de los usuarios solo les interesan los servicios de streaming. En este sentido, no hay nada que lamentar, ya que la TV incluye la app de Netflix preinstalada y agrega la posibilidad de sumar otros servicios de gran popularidad, como Spotify. Asimismo, también ofrece de forma predeterminada las Apps Google Play Movies, Google Play Music y YouTube, todas ellas de la firma de Mountain View.
Vale destacar que, al ser un SO tremendamente popular, es de esperar que con el tiempo el Play Store se llene de Apps especialmente diseñadas para TVs, ya que la comunidad de developers es infinitamente superior a la de sus rivales inmediatos, WebOS (LG) y Tizen (Samsung).
Por último, un punto a tener en cuenta a la hora de disfrutar la experiencia Android TV. Al ser de solo 8GB el almacenamiento interno, habrá que ser cuidadoso con los contenidos que se alojan en el dispositivo ya que se llena con solo utilizar media docena de Apps. Afortunadamente, se puede expandir utilizando un dispositivo USB, según detalla el fabricante en su manual.
Conclusiones
Lentamente, la tecnología 4K comienza a masificarse, gracias al lanzamiento de equipos que combinan la más alta tecnología Ultra HD con precios razonables. La variante testeada por RedUSERS se puede conseguir, a julio de 2016, a un precio aproximado de AR$17.000, dependiendo de la cadena de retail.
Teniendo en cuenta la relación precio-producto, el Philips 7100 es sin dudas una de las opciones de cabecera a la hora de renovar la TV por una que soporte tecnología 4K. Asimismo, Android TV es un gran plus, a pesar de ser no tener la cantidad de Apps que si ofrece la versión para smartphones.
En definitiva, a la hora de hacer el balance final, pesan muchísimo más los pros que los contras, por lo que la TV de la firma holandesa sale de la redacción con el sello de “aprobado”.
Pros
-Diseño elegante
-Android TV
-Control remoto con teclado QWERTY
-Excelente calidad de imagen
Contras
-Solo 8Gb de almacenamiento interno
-La resolución 4K no logra lucir en todo su esplendor en sólo 43 pulgadas.
Puntaje: 9
Juan Castiglione
RedUSERS Labs