15 octubre, 2011
La Ley de la Autoestima podría llegar a ser la futura normativa que regule el retoque digital en modelos, actores y actrices de revistas y propagandas.
Esta campaña iniciada por Seth y Eva Matlins, una pareja estadounidense que piensa que sus hijos deben crecer sin superficialidad, de la perfección y la belleza establecida por los mercados y comerciantes que están muy alejadas de la realidad y causan problemas psicológicos y físicos en el desarrollo y crecimiento de adolescentes.
“No podemos ignorar que nuestra cultura de la belleza tiene efectos tremendamente negativos sobre las niñas y las mujeres. Los problemas son reales, serios y duraderos, ocurren cuando no nos damos cuenta de que las imágenes y los ideales del cuerpo humano presentado en los medios de comunicación, está creando falsas expectativas y normas para la población femenina de nuestro país” denunció Seth Matlins.
Podemos tomar el ejemplo de la imagen de la nota, en la que Julia Roberts en la campaña de la compañía Lancôme tiene toneladas de retoques mediante Photoshop, lo que le da una sensación de irrealidad y obviamente engaña a los posibles compradores. En algunos lugares del mundo como el Reino Unido se retiraron las fotografías.
Según un estudio realizado por los impulsores de la ley, el 80% de las mujeres se sienten inseguras con su imagen al compararlas con la de las estrellas y modelos de su edad o mayores. Además el estudio reveló que el 71% de las adolescentes sienten que no están a la altura de las jóvenes estrellas de su edad, lo que les produce baja autoestima y hasta en algunos casos depresión.
“Estas cifras muestran que tenemos un problema social cuyas consecuencias tienen graves efectos sobre la felicidad individual, el bienestar, la productividad económica e incluso un asombroso número de muertes por trastornos alimentarios cada año“, menciona Eva Matlins. “Queremos que nuestros hijos contextualicen lo que ven, un cambio de moralidad es preciso”
Obviamente no se le puede echar toda la culpa al software de Adobe, ya que las empresas de ropa, cosméticos, etc. determinan lo que “es lindo” o lo que está de moda, por ende se utilizan estos programas para alcanzar algo que es muy poco probable de ser sin ellos.
Fuente: Dailymail.co.uk