7 febrero, 2017
Sony es una de las firmas más prestigiosas en lo que ha desarrollo de lentes se refiere. La firma nipona, proveedora de cámaras para la gran mayoría de los fabricantes de dispositivos móviles, seguramente revalide sus pergaminos con su último desarrollo: un sensor CMOS que incluye su propia DRAM dedicada.
Actualmente, los sensores CMOS convencionales constan de dos capas, una de ellas es el propio sensor de imagen y la otra una sección de circuito para procesar las señales que produce el sensor de imagen. Ahora, Sony agregó un tercer componente, creando el primer sensor CMOS apilado de 3 capas de la industria, empaquetando su propia DRAM. La memoria añadida permite al nuevo sensor procesar una imagen fija de 19,3 MP en sólo 1/120 de segundo. Eso es aproximadamente cuatro veces más rápido que el modelo anterior de Sony con el mismo número de píxeles. La mayor velocidad de lectura de cada línea de píxel produce además una menor distorsión al tomar fotos de objetos en rápido movimiento.
Además, el nuevo sensor de Sony es capaz de grabar vídeos en cámara lenta con una velocidad de hasta 1.000 fotogramas por segundo (FPS), siempre que el software que lo controla pueda manejar tales velocidades. En este momento, los teléfonos inteligentes de alta gama alcanzan velocidades que son, en el mejor de los casos, cuatro veces más lentas, ubicándose en el orden de los 240 cuadros por segundo. Eso no es todo, la cámara del fabricante japonés realmente puede capturar videos slow-mo en 1920×1080 píxeles, es decir, en Full HD.
La captura de cámara lenta se puede configurar para que se inicie automáticamente cuando se detecta un objeto que se mueve rápidamente y, puesto que se almacena en la propia DRAM del sensor, no debería afectar en absoluto al rendimiento de la cámara. Esto significa que el usuario obtener la misma experiencia tanto con un video de cámara lenta, como con uno regular.
Vía: PhoneArena