18 abril, 2013
La firma finlandesa publicó su balance financiero correspondiente al primer trimestre de 2013, y si bien las pérdidas operativas fueron nuevamente uno de los factores, la disminución en las ganancias no fue tan pronunciada como en cuartos anteriores.
Las ventas del gigante móvil alcanzaron los 7600 millones de dólares, y la pérdida neta por acción fue de 3 centavos. Vale destacar que si bien hubo pérdidas, la disminución en el valor de las acciones fue menor que la esperada (los pronósticos hablaban de 5 centavos “per share”), y constituyó una caída de menos de la mitad del valor correspondiente al año anterior, cuando se perdieron 0.08 U$D por cada acción.
Las pérdidas operativas netas de la firma, en tanto, alcanzaron los 196 millones de dólares. Nuevamente, los números siguen siendo alentadores, ya que representan una sustancial mejora con respecto al anterior trimestre, en el cual se perdieron 557 millones, y ante el Q1 de 2012, en el cual la pérdida alcanzó los 1700 millones. En base a estos guarismos, los márgenes (negativos, obviamente), fueron solamente de 1.5%, mejorando el 6.8% del trimestre anterior.
Por otra parte, y concordando con las predicciones de algunos analistas, la firma vendió 5.6 millones de dispositivos Lumia durante el trimestre, en un aumento en las ventas de esta línea de productos que alcanzó un 27%. Mientras Nokia se propone mejorar las ventas de equipos de gama media y baja, al mismo tiempo pronostica una nueva alza de sus equipos Lumia durante el Q2 2013, aventurando la venta de 7.1 millones de unidades, casualmente, otro aumento del 27%.
Por úiltimo, vale agregar que a pesar del aumento en las ventas de los smartphones de la firma, la venta de equipos en general totalizó 3800 millones de dólares, un 25% menos que el trimestre anterior, y un 32% menos que hace un año. Además, y gracias al tándem Android/iOS, China ya no representa un paraíso para los equipos de Nokia, y se vieron fuertes disminuciones en volumen y ventas, las cuales alcanzaron 334 millones de dólares, un 56% menos que el año anterior.
Vía: TechCrunch