4 diciembre, 2008
Esa es la conclusión que arrojó el último informe elaborado por IDC sobre la venta de computadoras en todo el mundo: pese a la debacle financiera, el segmento seguirá expandiéndose a ritmos menores.
Según la consultora internacional, la venta de PCs crecerá un 3,8% durante 2009, cayendo la cuota de valor de los equipos un 5,3%. Sin embargo, las proyecciones para el segundo cuarto son mucho más optimistas: crecimiento de 13.7% en ventas y 4.5% en valor.
Esto quiere decir que el mercado de PCs seguirá creciendo lentamente hasta finales de 2008 (recuerden que aún faltan las ventas motivadas por las fiestas), pero que a comienzos de 2009 experimentará una recaída, que será la mayor en 7 años.
En este sentido, 2009 será lento pero servirá de base para la recuperación siguiente: las previsiones de IDC señalan que el mercado mundial de PCs pasará del 3.8% al 10.9% en 2010, al 12.6% en 2001 y 12.9% en 2012.
Comparaciones aparte, el escenario actual es parecido, pero no tan dramático, al que por ejemplo experimentó Argentina durante la crisis de 2001.
Quizás la noticia más negativa que arrojó el informe está relacionada con los vendedores de desktops y servidores x86, quienes deberán soportar una tormenta. Si ya este año el segmento declinó en crecimiento un 2.9%, en 2009 la caída llegará al 6.7%. Por suerte comenzará a recuperarse en 2010, donde crecerá casi un punto para llegar al 2011 con un crecimiento del 2.8%.
Los datos más alentadores van de la mano del producto estrella del 2008: las netbooks. Este nuevo segmento, que se presenta para los consumidores como una opción para aquellos que no pueden comprar una laptop, pero que desean cierta experiencia de movilidad.
El segmento mobile creció un 35% durante 2008, descenderá a 15.2% el próximo año, y levantará a partir del 2010, donde se prevé un alza del 19.5%.
Como siempre decimos, será cuestión de esperar a ver cómo evoluciona el mercado para manejar los resultados reales. Igualmente vale apoyarse en el informe de IDC; pues está demostrado que en el pasado siempre estuvo cerca de las cifras reales.