26 octubre, 2012
A pocos días de la presentación del nuevo iPad, el sitio iFixit, dedicado hace años al desguace didáctico de equipos Apple para ayudar a las reparaciones caseras, hizo eco de los ultimos lanzamientos de la manzana plateada.
En este caso, y en otro de sus ya famosos teardown, el sitio otorgó el protagónico a la nueva MacBook Pro Retina Display de 13 pulgadas que se presentó en conjunto con el esperado lanzamiento del iPad de 7 pulgadas.
Desde ya, la delgadez extrema del equipo, que se puede apreciar en la imagen comparativa con la MacBook Pro de 13 pulgadas modelo 2011, hace suponer que las piezas internas están dispuestas de forma muy complicada y apretada, desfavoreciendo el desarme y posterior reparación.
A lo largo de los 22 pasos del desarme se van encontrando en igual proporción genialidades de diseño y grandes complicaciones, tales como los tornillos pentalobe, que son particulares de los productos Apple, o los fans disipadores, que al tener espacios asimétricos entre sus hélices aseguran menor ruido de funcionamiento.
Si hablamos de las contras, las celdas de batería están, de la misma forma que la MacBook Retina de 15”, fijadas con cemento a la carcasa, mientras que las memorias RAM están soldadas a la placa base, entonces deberemos quedarnos ad infinitum con esa capacidad de memoria y rezar porque no se estropeen nunca. Otro punto menos: las piezas de la pantalla no se pueden separar, por lo que ante una falla en el Retina Display, se deberá cambiar todo el panel completo.
Por su parte, la reducción del tamaño total del equipo favoreció a que el trackpad pueda ser reemplazado fácilmente, ya que solamente 5 tornillos lo mantienen en su lugar y no está cubierto por una celda de batería, como en el modelo de 15 ”: en lugar de ello, debajo del trackpad se encuentra el disco SSD de 256 Gb.
La pequeña laptop recibió un puntaje de 2 sobre 10, siendo 10 el equipo más fácil de reparar.
Vía: FayerWayer, iFixit