29 abril, 2016
Una nueva patente presentada por Google adelantaría los próximos pasos de la compañía en el campo de la tecnología para vestir. La firma de Mountain View está trabajando en un lente que llevará la experiencia Google Glass a un campo, literalmente, más inmersivo, ya que podrá inyectarse en el ojo.
El dispositivo incorporará su propio almacenamiento, un transmisor de radio y una batería que se podrá cargar de manera inalámbrica ( sería sumamente incómodo tener que conectar un ojo a un tomacorriente). Según Forbes, el lente servirá además para aumentar la concentración de luz en la retina y, por ende, mejorar la visión de aquellos usuarios con problemas de vista. Vale destacar que se trata solo de un prototipo, por lo que podría quedar solo en un proyecto y no ver jamás la luz.
Los rumores sobre los trabajos de Google alrededor de esta tecnología se remontan a 2014, cuando la empresa registró una patente relacionada a lentes de contacto inteligentes. Estos incluían un pequeño chip capaz de monitorear los niveles de glucosa del usuario, y estuvieron cerca de convertirse en un realidad cuando Google se asoció a la firma Novartis para desarrollar tecnología relacionada con el ámbito de la salud.