21 febrero, 2019
Las principales autoridades de la Unión Europea se han puesto de acuerdo para impulsar un proyecto que busca ajustar los derechos de copia y autoría a la era digital. El objetivo es proteger a los creadores, la prensa, los investigadores, los educadores y a los ciudadanos en general. Los cambios son numerosos, pero los artículos que han quedado en el centro de la discusión son el 11 y el 13, dado que el impacto que podrían tener para Internet es importante.
El artículo 11 establece un derecho para los editores de prensa que supondría que cada vez que un tercero utiliza lo que un medio ha producido, deberá realizarse un pago a cambio. Esta iniciativa es sin dudas la respuesta que muchas empresas productoras de contenido esperaban, en especial diarios y revistas, que han visto sus artículos reproducidos en redes sociales como Facebook o servicios como Google News durante años.
Google ha señalado que en respuesta a la iniciativa retirará el servicio Google News de Europa, si los editores no pueden renunciar a sus derechos.
Por su parte el artículo 13 establece un marco legal para que las plataformas para la producción de contenido paguen a los creadores. Actualmente la relación comercial entre estos medios y los productores queda bajo la absoluta discreción de las plataformas, que son las que establecen como se reparten los ingresos generados por la publicidad. La única defensa que tienen los productores es la existencia de cierto nivel de competencia, pero considerando la supremacía que algunas plataformas han conseguido, como es el caso de YouTube o Twitch, esto sirve de poco.
El proyecto busca establecer una remuneración adecuada y proporcionada para los autores y los artistas, y darles acceso a información transparente sobre cómo sus trabajos y actuaciones son explotados por editores y productores.