26 noviembre, 2012
La tecnología RFID —que permite almacenar y leer datos de identificación en etiquetas (tags) que emiten ondas de radiofrecuencia— existe desde hace ya algunos años, pero su utilización sigue estando poco extendida, principalmente debido a que los tags todavía no son lo suficientemente baratos. En Argentina, los servicios RFID más populares son Telepeaje y Monedero.
En Estados Unidos, las autoridades de la escuela secundaria John Jay de San Antonio, Texas, han decidido incluir un chip RFID en las credenciales de identificación de sus más de 6.000 alumnos, quienes serán obligados a llevarlas colgadas del cuello a fin de controlar si han asistido o no a clases, así como todos sus movimientos dentro de la institución. El costo de implementación del sistema asciende a US$ 525.000 y su mantenimiento demandará US$ 136.000 anualmente, pero le permite a la escuela demostrar con precisión su matrícula ante las autoridades, lo que le asegura US$ 1.700.000 extras de subvención estatal.
La utilización de sistemas de rastreo en instituciones educativas ha sido criticada por los principales organismos dedicados a la defensa de las libertades individuales en la era digital —como la Electronic Frontier Foundation, EPIC o ACLU—, que lo consideran un método deshumanizante que no solo viola la libertad de expresión y asociación, sino que además genera toda clase de riesgos de seguridad por ser vulnerable al ataque de hackers.
En efecto, la alumna Andrea Hernández se ha negado a usar la tarjeta de rastreo, invocando motivos religiosos y de privacidad. Las autoridades educativas del distrito le ofrecieron remover el chip RFID de su credencial, siempre y cuando la alumna manifieste públicamente su respaldo por el sistema. Hernández persistió en su negativa, por lo cual se le comunicó que será expulsada de la escuela a partir de este lunes.
La abogada de la familia Hernández presentó una medida cautelar ante los tribunales de Bexar County, mediante la cual la expulsión quedó temporariamente suspendida, a la espera de una audiencia judicial que sellevará a cabo la semana que viene.
Fuente: The Verge
