4 enero, 2010
Recién acaba de terminar la primera década del siglo XXI y muchos usuarios que hoy visitan diariamente su perfil de Facebook o Twitter, consultan la pantalla de su celular o revisan la bandeja de entrada de su correo electrónico. Actividades cotidianas, que casi no existían hace diez años.
Según el portal 20minutos.es, Internet, como se concibe hoy en día, nada tiene que ver con la red de 1999: la revolución digital en la que está inmersa la sociedad se apoya en cuatro pilares: el almacenamiento, la potencia, el ancho de banda y el aumento de puntos de acceso y cinco pasos explican los cambios fundamentales.
El primero de ellos, la transición del acceso a Internet desde puntos fijos hacia la revolución tecnológica del momento: el cloud computing.
En segundo lugar, hace diez años las empresas presentes en la web estaban “obsesionadas por generar contenidos”, pero poco a poco fueron dando protagonismo a los usuarios hasta que estos, a día de hoy, han conquistado la red gracias a la creación de contenidos en tiempo real.
Y si cambió la forma de acceder a Internet y el rol de los usuarios, la publicidad también tuvo que cambiar con ellos. Los típicos banners de los noventa se volvieron invisibles para los internautas y las empresas tuvieron que comenzar a segmentar sus audiencias en Internet e intentan ahora abrirse camino en las redes sociales.
También se modificó la forma de comunicarse: en 1999 el mail ya había ganado terreno al correo tradicional. Después llegó la comunicación en tiempo real con MSN y más tarde, las redes sociales y la necesidad de saber siempre y en todo lugar qué está pasando, un dolor de cabeza de los tradicionales medios de comunicación que se han visto desplazados por esta nueva forma de vincularse.
Por último, la privacidad. De la desconfianza inicial de los usuarios hacia Internet se pasó al extremo opuesto. Internet se convirtió en un espejo de las vidas de los internautas que volcaban en la red toda su información personal.
Poco tiempo después, parece que la tendencia comienza a invertirse con ciertos controles de la privacidad por parte de las empresas que gestionan redes sociales y buscadores.
¿Qué opinan ustedes?
