10 abril, 2017
Exceptuando a Tesla, la mayoría de los fabricantes de automóviles todavía aún no ha desplegado de manera masiva opciones de autoconducción en sus modelos. General Motors quiere cambiar esta tendencia con el lanzamiento del Cadillac CT6 2018 (llegará al mercado en el tercer trimestre de 2017), el primero de su línea que utilizará tecnología Super Cruise, la cual puede tomar el control cuando se transita en rutas.
Una de las principales diferencias con el modo de autoconducción de Tesla es que en el Cadillac no se requiere que el conductor mantenga las manos en el volante; alcanzará con solo mirar el camino. Una cámara infrarroja en la columna de dirección sigue la cabeza del usuario para asegurarse de que está prestando atención; en caso contrario, la unidad enviará alertas o estacionará a un costado de la ruta el vehículo si nota que no mantiene los ojos hacia adelante.
Super Cruise promete un nivel adicional de precisión cartográfica gracias al uso de datos de dispositivos LiDAR (registrados por otros automóviles, no por el CT6) además de los habituales sensores de a bordo y GPS. Esta tecnología también permitirá que el Cadillac establezca dónde se podrá usar la función de autoconducción: sólo se permitirá en las rutas de acceso limitado con claras rampas de entrada y salida. El ingeniero líder de Super Cruise, Barry Walkup, indicó que han limitado el uso de la característica para “ganarse la confianza del consumidor y de los entes de regulación” en tecnología de conducción avanzada.
La actualización sin duda comparte una cosa en común con Tesla: es cara. El CT6 tiene un valor de 66.290 dólares, y a eso habrá que sumarle otros 2.500 dólares para añadir Super Cruise.
Vía: Engadget