21 julio, 2011
Uno de los referentes mundiales que tuvo Campus Party en su primera jornada fue Al Gore en un panel sobre el futuro de la web y su papel en la sociedad.
El eje principal de la conferencia estuvo en torno a los derechos de autor y privacidad de la información, acompañado de los llamados “padres de internet” Vinton Cerf y Tim Berners Lee.
En cuanto a protección a la propiedad intelectual digital destacó que las empresas que producen contenido audiovisual deben apreciar a Internet como un aliado y no como un enemigo que les quitará recursos económicos.
“Internet ha abierto la posibilidad para que las compañías encuentren un sistema balanceado entre el contenido de paga y el contenido gratuito. Creo que la mejor manera de tener contenido en la web es bajo una licencia de Creative Commons y no bajo un sistema completo de derechos reservados”
Recordemos que Creative Commons es una plataforma que se basa en un modelo de licencia que define qué derechos se reserva el autor, y cuáles cede a los usuarios. En mayor o menor medida se renuncia a ejercer derechos sobre la propiedad intelectual en favor de la libre circulación de ideas y conocimientos. De esta base surgen conceptos muy útiles para aquellos que creen en internet como medio de difusión.
Respecto a la privacidad, Gore también habló sobre el reciente escándalo de espionaje que afecta al empresario Rupert Murdoch.
“Esta violación de la privacidad fue un acto terrible contra los derechos humanos, pero hay muchos otros casos que no han salido a la luz, hay que darse cuenta del potencial que tiene la red, pero que también puede tener daños profundos en las personas”
El escándalo de intervenciones telefónicas afectó directamente a los negocios de Murdoch, a políticos británicos y a la policía; además, obligó a News Corp a abandonar una oferta para comprar la totalidad de la cadena satelital BSkyB.
Ambos temas son de vital importancia para el futuro de la red. En los últimos tiempos estamos viendo como varias batallas se centran en el tema derechos de autor, políticas de privacidad y varios “hacktivistas” de por medio imponiendo su manera de pensar. Como ejemplo en Latinoamérica tenemos el renombrado caso Taringa! y recientemente la disputa legal que posee Juana Viale (actriz argentina) contra el mismo sitio ya que en Poringa! (su portal dedicado a material con contenido sexual) publicaron fotos de la intimidad con su actual marido.
¿Ustedes que opinan? ¿Hasta dónde llega el límite de lo publicable?
