24 marzo, 2008
En virtud de que la convergencia en las redes de comunicaciones y la creación de contenidos por parte de los usuarios exige una velocidad de transferencia cada vez más amplia, el acceso a internet de banda ancha a través de la red de electricidad en hogares y empresas –denominado PLC (Power Line Communication)–, sigue siendo testeado en el país por Edenor, empresa que planea brindar servicios de internet a través de los tomacorrientes, sin otros cables que los del tendido eléctrico existente en cualquier casa u oficina.
La tecnología PLC posibilita un ancho de banda de 200 Mbps, permite vincularse a la web en aquellos lugares a los que, por cuestiones de cobertura e inversión, la banda ancha por telefonía fija (ADSL) no llega, y ofrecería una velocidad de conectividad de 30 MB para el mercado argentino, asegurando el rendimiento de la futura IPTV, esto es, señales de televisión que utilizan conexiones de banda ancha sobre el protocolo IP.
Dicha modalidad ya es un hecho en países como España y Francia y, según Javier Gómez, responsable de Linksys para el sur de Europa, puede considerarse más un complemento a la tecnología Wi-Fi que una alternativa, ya que no necesita configuración y su instalación es tan sencilla como enchufar un electrodoméstico.
Sin embargo, durante el último año varias empresas europeas decidieron abandonarla por la fuerte competencia existente entre los operadores, que están rebajando los precios de las líneas ADSL y multiplicando la capacidad de acceso, y por los problemas técnicos que generan las interferencias y la falta de estabilidad.
No obstante, un estudio de la consultora Burton Group reveló que la tecnología PCL se irá imponiendo en los próximos años de forma global y que se está enfocando como alternativa para llevar la conexión a internet a zonas rurales y aisladas, en las que no es económicamente viable crear centrales ADSL o donde el único cable que llega es el de las líneas eléctricas.
En tanto, de acuerdo al portal de noticias Infobaeprofesional.com, en Argentina Edenor aún se encuentra probando la solución, y todavía no definió si explotará la provisión de conexión a la red de manera directa o a través de terceros, en cuyo caso deberá lograr que la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) le otorgue, en el corto plazo, el correspondiente permiso que la habilite para operar como proveedora de internet.