5 febrero, 2010
La Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) fue notificada de los amparos promovidos por Iusacell y MVS en contra de las actuales licitaciones de frecuencias para servicios de telefonía e Internet, pero según Gonzalo Martínez Pous, comisionado del organismo, éstos no frenan el proceso en curso.
Esta semana, MVS obtuvo una suspensión provisional, esto es, que el juez ya concedió la razón a la empresa una vez que ésta argumentó que se encuentra en indefinición jurídica, pues tiene concesiones vencidas desde hace cinco años, sin que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) solucione sus solicitudes de prórroga.
En el caso de Iusacell, el Juez IX de Distrito admitió el recurso promovido por la telefónica, sin que hasta el momento se haya concedido el amparo.
Según comentó Martínez Pous a El Economista, lo que buscan las empresas no es frenar el proceso; pero de obtener la suspensión definitiva, lo que se frenaría es la asignación de las frecuencias a las empresas que resulten ganadoras.
“Pero es muy poco probable que el Juez les conceda la razón, porque primero deberá escuchar nuestros argumentos (de la Cofetel) y darnos el respaldo de la Suprema Corte que indica que las licitaciones son proceso de beneficio e interés social”, añadió el comisionado.
Por otra parte, José Manuel Mercado, analista de Frost&Sullivan, comentó al respecto: “por muchos años se esperaba la licitación de más espectro y cuando finalmente la autoridad lleva a cabo el proceso, comienzan las disputas legales. Un retraso más, después de un año económicamente casi perdido, dejaría a miles de usuarios sin la posibilidad de obtener mejores servicios de telefonía móvil“.
