16 octubre, 2009
Seguramente, pocos de los lectores de este informe conocerán un programa que incluye Windows Vista para controlar la performance y la estabilidad del sistema. Se trata del Monitor de confiabilidad y rendimiento. Para ejecutarlo, vamos al menú [Inicio], escribimos buscamos la palabra monitor y aplicamos un doble clic en el icono que aparecerá en el panel izquierdo del menú Inicio.
Este programa se compone de dos paneles: uno derecho, el cual posee una estructura de árbol y podemos navegar ciertas opciones; y otro derecho, que es el lugar donde se exponen los datos. Apenas ejecutemos el programa, veremos varios sectores que nos indicarán el uso del CPU, el disco, la red local y la memoria.
Estos recuadros pueden minimizarse o maximizarse con sólo hacer clic en los títulos.
Por ejemplo, si pinchamos el sector [Introducción a los recursos] veremos pequeños gráficos de fiebre para monitorear el uso de los componentes del sistema. Por su parte, el resto de los sectores nos mostrarán una lista de los programas y el porcentaje de uso de los diversos recursos.
Además, podemos aplicar un clic en el ítem [Herramientas de supervisión] del panel derecho, donde encontraremos dos subramas que nos permitirán elegir qué vamos a monitorear. Mediante un clic en [Monitor de rendimiento], aparecerá una especie de electrocardiograma que mostrará en tiempo real el estado de los recursos de nuestra computadora.
En cambio, al presionar la rama [Monitor de confiabilidad] nos trazará un calendario donde podremos ver día por día qué elementos de hardware o software están funcionando incorrectamente.
Como verán, Windows Vista nos ofrece varias opciones para monitorear la salud de nuestra PC. Eso sí, no son recomendables para usuarios obsesivos del rendimientos ni hipocondríacos digitales. En caso contrario, estaríamos provocando lo que queremos evitar: las inútiles pérdidas de tiempo.
Truco publicado en Users 221.
