6 marzo, 2019
Project Dragonfly es el nombre que había recibido el buscador que Google estaba desarrollando para ser utilizado en China. Esta producción resultó polémica desde el momento en que se dio a conocer dado que tenía como característica distintiva adaptarse a los requisitos de censura del gobierno chino. En teoría, luego de las fuertes reacciones adversas que recibió el proyecto, incluyendo presión política y el descontento de los empleados, Google lo habría cancelado. La compañía incluso había afirmado que no tenía intención de lanzar un buscador especial en China.
Sin embargo, el actual CEO de Google, Sundar Pichai no se ha pronunciado hasta ahora en contra de la idea.
Nuevo código
Recientemente un grupo de empleados de la compañía descubrió código asociado a DragonFly en las aplicaciones Maotai y Longfei, que han sido diseñadas para dispositivos móviles con Android y iOS.
No se trata de código residual. Según un reporte realizado por The Intercept unos 500 cambios en el código se han producido durante Diciembre, y otros 400 se realizaron entre Enero y Febrero de 2019.
Los empleados de Google calculan que unos 100 desarrolladores deben estar trabajando en el proyecto.
El descubrimiento ha despertado el malestar dentro de la compañía. Muchos creen que detrás de esta reactivación de Dragonfly se encuentra Sundar Pichai, quien vería al nuevo motor de búsqueda como una ventaja comercial para acceder a más de 800 millones de usuarios de Internet. La asociación Amnistía Internacional le ha pedido a la compañía que confirme públicamente que ha descartado Dragonfly para siempre, incluso ha enviado a su Secretario General, Kumi Naidoo a las oficinas de Google para expresar su preocupación.
La respuesta de Google
Google ha señalado recientemente que el informe de The Intercept es incorrecto y pura especulación. También ha recordado que la compañía ha dicho durante meses que no planea lanzar un buscador en China y no está trabajando en Dragonfly.