13 febrero, 2019
Apple se apresta a lanzar un servicio de noticias y cómo es de esperar muchas publicaciones estarían dispuestas a participar del negocio. Sin embargo, según un reporte del Wall Street Journal, la repartición de los ingresos sería de un 50% para Apple y un 50% para las editoriales. Por supuesto, esto no ha caído muy bien en muchos diarios y revistas.
La compañía también se quedaría con el manejo de los datos de los suscriptores. Esto por un lado puede verse como algo positivo, dado que Apple ha insistido en los últimos años en hacer de la privacidad de sus usuarios una virtud de sus servicios. Sin embargo, desde el punto de vista de las editoriales supone una gran limitación en la información que reciben de sus lectores.
El primer signo de que Apple estaba interesada en el negocio se dio con la compra de Texture en 2018, una empresa que ofrecía un servicio suscripción a revistas y periodicos.
El servicio podría llegar a mitad de 2019, estaría disponible en dispositivos iPhone, iPad y Mac y tendría un costo mensual de USD 9,99. Redondeando a USD 10 Apple se quedaría con 5 y los 5 restantes se repartirían entre las editoriales según el uso de cada suscriptor. En comparación la suscripción para The New York Times en su propia plataforma es de USD 1 por semana, es decir USD 4 por mes que van directo a esa publicación.
Ser accesible a través de la plataforma que disponga Apple será sin dudas de gran beneficio para amuchas publicaciones, dado que les ofrecería una mayor difusión. Sin embargo en el caso de las grandes compañías es posible aventurar una mayor pelea por el esquema de repartición de los ingresos. Entre las empresas enfrentadas a Apple estarían The New York Times y el Washington Post. Por su parte, The Wall Street Journal señaló estar negociando con Apple y que la conversación ha sido por el momento muy productiva.
Actualmente las editoriales que ofrecen contenidos por Apple News obtienen ingresos por anuncios de los cuáles conservan el 70% del valor, y tras un año el 85%. La idea de Apple es que el servicio de suscripción reemplace los anuncios.