28 enero, 2019
Anthem es una de las primeras grandes producciones de 2019 dentro del mundo de los videojuegos. Es el proyecto en el que BioWare, uno de los estudios más prestigiosos de los últimos años, ha puesto mucho esfuerzo y en el que EA, la empresa distribuidora, tiene grandes esperanzas. Se trata de un juego de acción en el que los jugadores utilizan trajes de alta tecnología (A la Ironman, por señalar un ejemplo sencillo) para combatir robots y extrañas criaturas (Obviamente estamos simplificando al extremo). Por sus características se lo ubica en el mismo género y estilo de Destiny y Warframe, aunque más cercano al primero que al segundo.
Anthem será lanzado oficialmente el 22 de Febrero. Para probar y promocionar el juego las empresas han decidido realizar un fin de semana de acceso anticipado para jugadores VIP. Es decir, unos pocos creadores de contenido y aquellos que adquirieron el juego por compra anticipada. Esta primera experiencia no ha sido la mejor.
Anthem demostró tener un sistema de juego sólido e interesante, con un nivel de producción bastante bueno aunque mejorable en detalles. Los problemas se dieron en el rendimiento. En muchos casos los enemigos desaparecían, o los jugadores se encontraban con que el movimiento de sus personajes era errático. El mayor inconveniente fue la conexión, que podía cortarse en cualquier momento y no restaurarse durante varios minutos o incluso horas. Algunos jugadores simplemente no pudieron conectarse desde el principio.
Bioware está aplicando varias correcciones y cree haber resuelto la mayoría de los problemas. La versión oficial señala que una combinación de las cualidades de las cuentas de usuarios que realizaron compra anticipada y la versión demo del juego habían causado que los jugadores no pudieran ingresar. Para compensar a los jugadores afectados la empresa le dará un skin extra, es decir una pieza cosmética, a todos los participantes de la demo VIP.
La explicación no oficial
Gossi un usuario del sitioweb ResetEra realizó una captura de paquetes de datos y descubrió que los problemas de conexión del juego podrían ser incluso peores. Cuando el juego no logra conectarse envía tantas peticiones al servidor que lo inunda. Esto hace que en la práctica el juego realice un ataque DDoS sobre sí mismo, y sobre los servidores de EA.
