10 enero, 2019
La ley de Moore señala que la cantidad de transistores, y por tanto la capacidad de procesamiento en un microprocesador, se duplica cada dos años. Fue formulada en 1965 por Gordon Moore, aunque originalmente había sido pensada para un periodo de un año. Según el CEO de Nvidia, Jensen Huang, la ley ya no puede cumplirse. Curiosamente esta afirmación coincide con otra predicción de Moore mucho más reciente que afirmó en 2007 que a la ley solo le quedaban unos 10 a 15 años.
El motivo es bastante sencillo, para aumentar la cantidad de transistores es necesario que estos sean más pequeños. Pero a medida que los componentes de los chips se hacen más pequeños los requisitos tecnológicos para el siguiente paso de miniaturización se vuelven más exigentes. Un ejemplo de esta dificultad puede observarse en los problemas que ha tenido Intel para implementar los chips con transistores de 10nm. No es que ya se haya llegado al límite de miniaturización, otras compañías han logrado alcanzar los 7nm. En el caso de Media Tek existen planes para emplear tecnología de 5nm.
“La ley de Moore suponía un crecimiento de 10X cada 5 años y de 100X en 10 años. En este momento el crecimiento es de un porcentaje pequeño. Cada 10 años se obtiene 2X”, explicó Huang.
Patrick Moorhead, analista en Moor Insights & Strategy señaló al respecto: “La ley de Moore, en su definición estricta de la duplicación de la densidad de los chips cada dos años, ya no se cumple. Si los chips dejan de encogerse podría ser catastrófico para la industria tecnológica”. Sin embargo, según Moorhead, las empresas han comenzado a explorar otras opciones, como el uso de GPUs para tareas antes destinadas a los CPUs. Una buena noticia para Nvidia que se encarga de la fabricación de estos dispositivos.
David Ku, Jefe de finanzas de Media Tek, cree que la ley todavía no ha muerto, pero se ha desacelerado. Sin embargo admitió que es posible que como consecuencia de las exigencias de los procesos de fabricación suban los precios.