19 diciembre, 2018
El Phoenix 99 Bionic Eye es un desarrollo a cargo de un grupo de la Universidad de Sidney que podría devolverle la vista de forma parcial a las personas con ceguera. En esencia se trata de un microchip que se implanta en la parte superior del ojo, no es en realidad un ojo artificial. Sin embargo la importancia de este avance es innegable.
El sistema funciona de la siguiente manera:
Las imágenes frente al usuario son captadas por una pequeña cámara montada en unos anteojos. La información es enviada entonces a un smartphone para su procesamiento. Luego se transmiten instrucciones a un dispositivo de telemetría implantado detrás de la oreja. El implante decodifica la señal y envía impulsos eléctricos. Estos impulsos son captados por el microchip que está conectado a un grupo de electrodos conectados al tejido nervioso del ojo.
Actualidad y objetivos
La tecnología está lejos de brindar la misma experiencia que la obtenida por un ojo sano, sin embargo podria suponer una gran cantidad de beneficios.
Gregg Suaning, profesor de ingeniería biomédica de la universidad, explica: “El sistema ha sido diseñado para estimular las células de la retina y ayudar al cerebro a interpretarlas y así ofrecer una sensación de visión al usuario (…) Los usuarios del ojo biónico verán imágenes pixeladas que ofrecen formas y bordes que les permitirán caminar por sus alrededores y les ayudarán a realizar las actividades de la vida diaria”.
El objetivo actual del proyecto es que las personas con ceguera puedan adquirir la capacidad para identificar a una persona, o los objetos cotidianos. El equipo encargado del desarrollo está preparando una petición para que se autoricen las primeras pruebas en seres humanos.