21 febrero, 2016
Samsung puso primera en el Mobile World Congress de Barcelona con su lanzamiento más importante de 2016: Los renovados Galaxy S7 y S7 Edge, que tendrán la dura misión de estar a la altura de los elogiados S6 y S6 Edge. Los flamantes dispositivos mantienen muchas de las características que volvieron a hacer atractiva a la línea S, pero ofrecen mejoras en la performance, sus lentes y construcción (IP68, resistente al agua y el polvo).
Una gran novedad en los nuevos equipos es que el fabricante surcoreano vuelve a ofrecer dos opciones de procesadores, de la mano de su chip Exynos, más una variante Qualcomm (Snapdragon 820), diseñada para el mercado estadounidense. Sus specs de hardware se completan con 4GB de RAM, micro USB, display Quad HD super AMOLED (la versión Edge pasa de 5.1 a 5.5 pulgadas), 32GB de almacenamiento (expandible vía MicroSD), batería de 3000 mAh (3600 para el Edge) y cámara de 12Mpx, con pixeles más grandes que su antecesora.
Respecto a este componente, Samsung aclaró que recibe un 56 por ciento más de luz, lo que mejora notablemente su performance en situaciones de baja luminosidad. Asimismo, el lente de f/1.7 paso de un formato 16:9 al tradicional 4:3, y su nuevo sistema de enfoque, similar al que utiliza Canon en sus cámaras DSLR, permite hacer foco 3 veces más rápido que con el S6.
Por el lado del software, el sistema operativo de fábrica es la versión 6.0 Marshmallow de Android, bajo la interface TouchWiz. En este apartado, la novedad más importante es el Always-on Display, que mantiene pixeles encendidos cuando la pantalla está apagada para mostrar información útil para el usuario.
Los dos smartphones llegarán a los principales mercados del mundo el 11 de marzo próximo, y ostentarán valores similares a sus antecesores, de acuerdo a las declaraciones oficiales de la compañía. Aquellos que hagan la reserva a partir del 27 de febrero recibirán además un Galaxy VR, la apuesta en realidad virtual del fabricante asiático.
Foto: Gizmodo.es