14 octubre, 2015
Un juzgado de Estados Unidos sentenció a Apple por la utilización patentes de la Universidad de Wisconsin, sin permiso de la entidad educativa. Según la universidad, estos planos fueron utilizados para la creación de los procesadores implementados en los últimos modelos de los iPhones, iPad Mini y iPad Air. De concretarse la sentencia, Apple deberá pagar U$S 862 millones por los daños causados.
La Wisconsin Alumni Research Foundation (WARF), demandó a la empresa de Cupertino en febrero del año pasado. Según la universidad, los chips A7, A8 y A8X, que utilizan los iPhone 5S, 6 y 6, se benefician de la tecnología desarrollada y patentada por ellos en 1998.
El juez del distrito y encargado del caso, William Conley, aseguró que el caso se encuentra “casi cerrado” y que es muy probable que la empresa de tecnología deba pagar la suma cercana a los mil millones de dólares. Por su parte, Apple intentó revertir la denuncia iniciando una petición en la oficina de patentes pero fue rechazada.
Cuando termine esta disputa legal, los problemas entre la universidad y la empresa diriga por Tim Cook no cesarán. El mes pasado la WARF volvió a demandar a Apple por la utilización de su tecnología en la creación e implmentación de los chips A9 y A9X, presentes en la nueva gama de iPhone e iPad Pro.
La WARF, descripta por el diario Business Insider como “una de las figuras más temibles en el tema patentes”, tiene un importante historial en este tipo de disputas. En 2008, la universidad presentó un caso contra Intel por la utilización de esta misma tecnología.
Fuente: TheVerge