22 junio, 2015
Las bifurcaciones entre la tecnología y la industria automotriz son cada vez más extensas. Por traer algunos casos, crece la producción y demanda de vehículos eléctricos, se espera que la propia Apple participe en este sector, y los coches de conducción autónoma comienzan a ser una realidad que no es exclusiva de Google; por ejemplo, Tesla también trabaja en aquel campo.
Los avances en este terreno también avanzan en pos de la seguridad vial. Aquí se anota un desarrollo de la automotriz Jaguar Land Rover, que avanza en un sistema capaz de leer diversos parámetros físicos de los conductores. Según cuenta The Verge, el sistema -en carácter de prototipo- se denomina “Mind Sense” y mide ondas cerebrales, respiración y ritmo cardíaco del usuario al volante. El mismo es una derivación de tecnologías utilizadas en medicina y ciencia aeroespacial.
De este modo, el sistema de Jaguar puede reconocer síntomas como el cansancio, el sueño o el estrés, para anticiparse a ellos y evitar accidentes viales derivados de aquellas situaciones desfavorables a la hora de manejar. Investigaciones de la automotriz indicaron que el estudio de las ondas cerebrales de las personas permite saber, en este caso, si se está prestando la debida atención al camino o si la concentración ha menguado.
Cuando “Mind Sense” detectada una anomalía, el volante o los pedales emiten una vibración en forma de alerta. Jaguar también contempla la posibilidad de emitir un sonido que ayude al conductor a recuperar la concentración.
Ahora bien, ¿cómo hace su “magia” el sistema de Jaguar? Al momento, para leer las ondas cerebrales requiere que el conductor lleve en su cabeza una serie de sensores y una vincha o diadema, aunque se espera que en un futuro los implementos de lectura sean ubicados en el volante, pudiendo detectar las ondas a través de los dedos. La respiración y los latidos se leen mediante sensores ubicados en el asiento del conductor.
