24 enero, 2014
Hace unos días, los usuarios argentinos nos desayunamos una noticia non grata para quienes compran equipos en el exterior: la Administración Federal de Ingresos Públicos anunciaba que los controles a las mercaderías que se compraran por correo iban a endurecerse.
Dentro de las nuevas resoluciones del ente recaudador, se encontraban como novedades la declaración jurada de los productos comprados y un límite anual de dos compras en tiendas del exterior con envío por correo postal. Por el contrario, la franquicia de 25 dólares y el pago del excedente eran medidas que ya estaban contempladas, pero pocas veces se cumplían. Así que mostramos la experiencia como un modo de “anticiparnos” a lo que vendrá.
A finales de julio de 2013, se compró una tablet en una tienda china, aprovechando un cupón de descuento de 22,99 dólares. Se trataba de la Ainol Novo 8 Dream, un equipo interesante por algunas de sus especificaciones: pantalla de 8 pulgadas con relación de aspecto “similar” a la del iPad Mini, procesador Dual Core, 1 GB de RAM y 16 GB de almacenamiento interno. Todo por 114 dólares (el valor real era US$ 137).
Dos semanas más tarde, el resumen de la tarjeta de agosto incluyó el importe: 655,27 pesos (el dólar estaba alrededor de AR$ 5,50 por esas épocas) y 131,05 pesos adicionales bajo el concepto “DB. RG. 3450 20%”, es decir, el adelanto del impuesto a las Ganancias y Bienes Personales resuelto por la AFIP, que en noviembre pasado subió del 20 al 35 por ciento.
En la segunda semana de septiembre llegó un sobre del Correo Argentino. No se trataba del aviso para que se retire el paquete a la sucursal, sino un telegrama que “invitaba” a abonar los “Derechos de Aduana” por 425,40 pesos (77 dólares al cambio de la época), más 5 pesos de “Tasa de Presentación de Aduana”.
El primer monto fue el 50 por ciento de la diferencia entre 25 dólares (lo máximo que se puede traer desde el exterior sin franquicia) y el precio de la tablet, según el valor de referencia de la AFIP, ya que las tiendas chinas suelen enviar paquetes etiquetados como “Gift” (regalos) e indicando bajos precios para evitar las trabas aduaneras. La tablet fue “cotizada” por el ente recaudador en unos 179 dólares. El precio orginal de la tablet, más el 20% y el “excedente” derivaron en un “precio final” de 1080 pesos.
El importe se abonó en la sucursal del correo correspondiente al domicilio, pero sin el equipo, puesto que el concepto “era para destrabar el equipo de la Aduana”. A la semana, hubo que retirar el equipo desde la misma sucursal del Correo Argentino.
Seguramente, las próximas compras que realicemos a tiendas chinas tendrán este grado de complicación. Además del formulario 4550, habrá que hacer algunas cuentas: la cotización del dólar, más el 20 por ciento de recargo, más el 50% del excedente de 25 dólares. Y sumarle dos visitas a la oficina de Correo Argentino más cercana.