18 junio, 2013
La polémica por el precio de las consolas de la nueva generación comenzó el día en que Sony hizo conocer el valor de la Playstation 4 para el lanzamiento, a unos U$D 399 iniciales. Todos miraron de reojo a Microsoft esperando la respuesta de porque saldrá U$D 100 mas teniendo las mismas o similares especificaciones técnicas.
Una semana después del anuncio, el presidente de contenido interactivo de Microsoft, Don Mattrick, dió a conocer la postura de la compañía en una charla con Bloomberg TV: “Cualquier producto moderno de hoy en día lo ves y $499 dólares no es un precio ridículo. Estamos entregando un producto con un valor de miles de dólares a la gente, así que creo que lo van a amar cuando lo usen.”
Muchos de los argumentos que intentó transmitir Mattrick se inclinaron hacia las futuras funciones que se podrán vincular, los accesorios que se podrán agregar y la conectividad con tablets, smartphones o dispositivos que tengan el Windows 8 como sistema operativo.
La situación se vuelve tirante con los usuarios cuando comienza el debate entre consola o centro de entretenimiento. Los potenciales compradores quedaron disconformes con la relación entre el precio y sus prestaciones debido a que esperan que la nueva Xbox sea un centro dirigido a los games. Pero se topan con aplicaciones como Skype, que vendrá incluida, que desalienta a los jugadores ya que prefieren no gastar en algo que no usaran.
El veredicto se conocerá en el momento del lanzamiento cuando Xbox One pueda demostrar que tanto explotó su potencial.
Fuente: The Verge