4 mayo, 2009
Según The Sunday Times, el gobierno laborista está desarrollando una tecnología secreta para controlar los mensajes de correo enviados por la red, las visitas a Internet y la actividad en las redes sociales.
El artículo publicado por el periódico asegura que el Centro de Comunicaciones del Gobierno recurrirá a una serie de cajas negras que insertará secretamente en la infraestructura de comunicaciones.
Como antecedente inmediato, la semana pasada, la ministra del Interior, Jacqui Smith, anunció que el Gobierno había decidido renunciar a su tan ambicioso como polémico plan de crear una base de datos única en la que se guardarían todas las comunicaciones efectuadas en el país.
La Ministra no mencionó, sin embargo, que el las autoridades prefirieron dedicar más de un millón de euros en tres años a ese programa de espionaje de los ciudadanos, denunció el periódico.
Según la directora de la organización de defensa de los derechos humanos Liberty, Shami Chakrabarti, reciente víctima ella misma del espionaje del Gobierno, el anuncio de la ministra es sólo ‘una cortina de humo’.
‘Nos opusimos a la base de datos de Gran Hermano porque permitía al Estado acceder directamente a las comunicaciones de todos los ciudadanos. Pero con esta red de cajas negras se pretende conseguir lo mismo aunque por la puerta trasera’, dijo la conocida abogada.
Según fuentes citadas por The Sunday Times, el Gobierno ya concedió un contrato por 200 millones de libras (224 millones de euros) al gigante estadounidense del sector de la defensa Lockheed Martin.
También se firmó un segundo contrato con Detica, empresa británica de tecnologías de la información, que mantiene estrechos vínculos con el espionaje británico.
Según esas fuentes, el director del Centro de Comunicaciones del Gobierno, Iain Lobban, supervisa actualmente la construcción de un nuevo complejo en el interior de ese cuartel general, situado en las afueras de la localidad de Cheltenham, en el condado de Gloucestershire.
Una enorme sala trufada de superordenadores permitirá a los espías del Gobierno supervisar y grabar los datos que pasen por las cajas negras instaladas en las conexiones de los servicios de Internet y las compañías telefónicas.
Por el momento, los espías que trabajan en esa central sólo pueden interceptar las comunicaciones en casos concretos y si se lo autoriza expresamente el titular del Interior o un secretario de Estado, pero con los nuevos planes del Gobierno, todos los ciudadanos del país podrán ser espiados en todo momento, señaló el periódico.
El anuncio publicado en la prensa especializada que reveló esos planes solicitaba a una persona que pudiera hacerse cargo de un programa gubernamental bautizado ‘Mastering the Internet’ (Dominando Internet), a la que se prometía un salario anual de hasta 112.000 euros.
El Gobierno afirmó que no se trata de leer el contenido de los mensajes intercambiados en Internet, sino de saber con quién se comunican determinados individuos y qué portales de Internet o redes sociales visitan habitualmente, algo imprescindible para combatir el terrorismo internacional.
Fuente amiga: Noticiasdot