21 mayo, 2013
Continúan las novedades sobre la Xbox One, y esta vez se revela la curiosa estrategia de Microsoft para limitar el mercado de los juegos de segunda mano.
Es que la Xbox One utilizará discos Blu–ray para sus juegos, pero los usuarios no los usarán tan frecuentemente como con la Xbox 360, ya que serán solamente para la instalación del juego en el HD del equipo. De esta forma, no será necesario insertar el disco en la consola cada vez que queramos iniciar un juego.
Esta noticia confirma rumores que llevaban varios meses, y que indicaban que Microsoft estaba desarrollando un sistema para bloquear juegos usados, en un intento de entorpecer la circulación de juegos de segunda mano, tema en el que Sony también se muestra preocupada, pero con otro enfoque. En concreto Microsoft no ha dicho nada sobre un posible bloqueo de juegos usados, pero la instalación obligatoria indicaría que las decisiones de la compañía van en este sentido.
Justamente, la firma aclaró que se cobrará por cada instalación que se haga desde un disco a una segunda cuenta de Xbox Live luego de la primera instalación. A rigor de verdad, esto no destruye el mercado de los juegos usados, pero al menos le saca un poco de rédito al tiempo que lo limita. La firma no indicó de cuánto sería la cuota a cobrarse.
Por otra parte, también existían rumores acerca de la supuesta conexión ininterrumpida de la consola a internet. Aparentemente, y según comentaba Marc Whitten a la revista Wired, esto no sería tan duro: en realidad, la Xbox One le permite a los desarrolladores crear juegos que funcionen en parte sobre el servicio en la nube Microsoft Azure, relegando algunas de las funciones del juego a la nube, para que la consola no deba aguantar todo el proceso. Claro, para que este tipo de juegos funcione, es necesario mantener la consola conectada, de forma que los recursos se puedan compartir.
