8 febrero, 2012
Un emprendimiento conformado por capitales públicos y privados comenzará a producir, a partir de este año, baterías de ion de litio en Argentina. Este desarrollo comenzó en 2011, a partir de un proyecto integrado por organismos científicos, las Universidades Nacionales de La Plata y Córdoba, la Comisión Nacional de Energía Atómica y el CONICET, recibiendo además financiamiento del Ministerio de Ciencia y Tecnología y el apoyo del Ministerio de Industria
Se estima que la primera partida de estas baterías estará lista en octubre y, en un principio, se fabricarán con pastas compradas. Para 2013 se espera poder producir la pasta en Argentina y para 2014, construir una planta de purificación de litio.
Esta planta mixta, que contará con el aporte del estado y capitales privados, tendrá un costo de entre U$S200 y U$S300 millones. La idea, según explicó Daniel Barraco, coordinador del proyecto y físico investigador del Conicet y de la Facultad de Matemática, Astronomía y Física (FAMAF) de la Universidad Nacional de Córdoba, es que se instalen plantas en Salta, Jujuy y Catamarca, donde se encuentran las reservas de litio (Argentina posee casi el 20% del litio del mundo) y laboratorios de investigación en La Plata y Córdoba. Así, lo que se busca es desarrollar un ciclo completo de extracción y venta.
A partir de este desarrollo, el Gobierno Nacional apunta a que la próxima generación de netbooks del plan Conectar igualdad cuenten con baterías desarrolladas en el país. También se venderán a grupos nacionales y multinacionales.
En una reciente entrevista brindada al diario La Nación, Barraco reveló los números que puede llegar a manejar la industria del litio:
“La salmuera que se extrae del salar cuesta 300 dólares la tonelada. Se la concentra y se obtiene carbonato de litio al 99 por ciento, es decir de la calidad que necesitamos; eso cuesta 6000 dólares la tonelada. Si llegáramos a tener litio metálico (litio puro), su valor sería de 6000 dólares el kilogramo. Y más: las baterías para autos híbridos y eléctricos, con 10 kg de carbonato de litio, cuestan entre 10.000 y 20.000 dólares.
No hay nada que impida que produzcamos baterías para autos, y tené en cuenta que en 2020 se estima que habrá unos 200 millones de vehículos eléctricos que las necesitarán. Es un negocio más grande que el del petróleo en su momento. De hecho, nuestra primera idea era hacer baterías para autos, porque la empresa con la que estamos asociados se dedica a hacer esa clase de baterías.”
Fuentes: El Cronista, La Nación